El responsable de Política Institucional del PNV, Koldo Mediavilla, ha manifestado que «la crisis gubernamental» entre PSOE y Unidas Podemos parece «evidente» y considera que, con su comportamiento, Pablo Iglesias está consiguiendo dar una «opción extra» al PP de Pablo Casado para «tomar oxígeno y recuperarse».
En un artículo publicado en su blog, recogido por Europa Press, el representante jeltzale analiza el gobierno de coalición conformado entre PSOE y Unidas Podemos que ha conseguido «salvar su año de mandato, y cuyo principal éxito ha sido sacar adelante sus primeros presupuestos generales».
No obstante, advierte de que, «pasado ese hito, los síntomas del cainismo han vuelto a aparecer y las relaciones entre socios se presentan envenenadas con un enfrentamiento que crece y cuya tensión no augura un buen final».
En esta línea, Mediavilla enumera, entre otras, las diferencias que se dan entre los socios en lo referido al área de igualdad, «con un enfrentamiento abierto y sin límites entre la vicepresidenta Carmen Calvo y la ministra Irene Montero».
«No es este el único ámbito en el que las relaciones PSOE-Podemos echan chispas. La comunicación entre Pablo Iglesias y el ministro Escrivá está prácticamente suspendida… La nueva operación de Podemos de llevar al Congreso una alianza de partidos, a modo de ‘trust’ político en defensa de sus planteamientos intervencionistas en relación a la vivienda, es un nuevo desafío que Iglesias plantea al PSOE», añade.
A su entender, el «clima de desconfianza» entre formaciones se generaliza y advierte de que, por primera vez, Pedro Sánchez ha desautorizado a su vicepresidente y reclamado del portavoz parlamentario de Podemos, Pablo Echenique, que rebaje «los decibelios en sus mensajes».
Por todo ello, el representante jeltzale afirma que «la política líquida ha vuelto a las andadas y la incertidumbre envuelve el escenario político español», de tal forma que «la crisis gubernamental parece evidente, aunque nadie aventura cómo concluirá este episodio de bronca endémica que aquí harta y exaspera y que, en Europa, nadie comprende».
«OPOSICIÓN DESDE EL GOBIERNO»
«Pablo Iglesias tira de estrategia. Su ojo clínico le indica que la presión hará que Sánchez ceda una y otra vez. Hacer oposición desde el propio gobierno es su receta. La fórmula de quien se cree el timonel de una izquierda que doblegará la resistencia de los socialistas. Iglesias se siente imprescindible y en su amenaza de ruptura no es un signo de fortaleza, sino todo lo contrario», advierte.
En este sentido, Mediavilla cree que la «falta de mesura» de Iglesias va a terminar por «desbordar el vaso». «Y no será él quien tome la iniciativa, sino que será Sánchez quien la promueva. Si aún no lo ha hecho, no será por ganas, sino porque teme que Iglesias le incendie las calles como respuesta. O porque aún no tiene garantizado el colchón parlamentario que compense la crisis», sostiene.
Por ello, el integrante del PNV opina que Iglesias está consiguiendo dar una «opción extra» al PP de Pablo Casado para «tomar oxígeno y recuperarse» e indica que si éste «utilizara su inteligencia, se prestaría a garantizar a Sánchez la tan necesaria estabilidad que la coyuntura requiere».
«Ganaría en reconocimiento de utilidad y se alejaría de la influencia corrosiva de la ultraderecha que, de seguir por las actuales coordenadas, le dejará sin sangre electoral en sus venas», expresa.
En su opinión, si Pablo Casado y el PP se prestaran a dejar gobernar por un tiempo a Sánchez, «rentabilizarían también el desalojo de Iglesias del poder». «Y ganaría oxígeno, tiempo y centralidad para abordar, con mayores garantías, un futuro más halagüeño para sus siglas. Los acuerdos alcanzados en el Consejo de RTVE y el que se espera lleguen en la renovación del CGPJ quizá sean un indicio de este nuevo tiempo», concluye.