El responsable institucional del PNV, Koldo Mediavilla, ha afirmado que el PP continúa «desnortado» de tal forma que «su inconsistencia y su histrionismo discursivo le mantendrán en la marginalidad» en Euskadi, mientras que en el resto del Estado se encuentra «atenazado por las presiones de la derecha económica y mediática», por lo que «la alternativa de Núñez Feijóo empieza a hacer aguas».
En un artículo de opinión publicado en Deia, recogido por Europa Press, el dirigente jeltzale acusa a la formación liderada por Carlos Iturgaiz de estar «empecinada en vivir en permanente radicalidad».
«Los populares vascos -cada vez menos populares entre los vascos- son tenaces en su apuesta de radicalismo desafinado, como de piñón fijo, y aunque las evidencias les hayan demostrado que por ese camino terminarán por situarse en la más estricta marginalidad política -casi lo están ya- no ceden en su propósito», critica.
A su juicio, ello «no deja de ser un lastre para Alberto Núñez Feijóo que necesita activar al Partido Popular vasco si de verdad aspira a alcanzar La Moncloa».
En este contexto, advierte que el político gallego ha visto cómo su «proyección demoscópica de meteoro se frenaba en seco por errores de bulto que han puesto en solfa su consistencia como líder de futuro» y su «inicial retórica de calculada centralidad ha ido dejando paso a ‘ocurrencias’ más propias de su antecesor que de su propio estilo».
Tras advertir que el PP ha «renunciado» a la renovación de su partido en la Comunidad Autónoma Vasca, «trasladando su congreso territorial más allá de las elecciones locales y forales», indica que Carlos Iturgaiz es un presidente «interino sin respaldo implícito de su militancia y con una brújula política escorada a la marginalidad».
«Carlos Iturgaiz y compañía no han tenido mejor idea para reforzar sus expectativas que plantar cara ‘a la omertá’ que según él ha decretado el PNV en Euskadi para ocultar su corrupción. Iturgaiz lo ha dicho sin ruborizarse, sin aportar datos que avalaran su gravísima acusación», rechaza Mediavilla.
Según advierte, las acusaciones de corrupción lanzadas por el PP contra el PNV «no son nuevas, ni hasta el momento han resultado efectivas de cara a mermar la buena imagen de gestión asignada a los nacionalistas».
«Ya en comicios territoriales anteriores desde ámbitos próximos a Podemos y, de manera más nítida, desde la Izquierda Abertzale, se orquestaron campañas en las que se acusaba a los jeltzales de múltiples supuestas malas praxis en su gestión institucional. Corruptos y corruptelas fueron la batería de imputaciones de brocha gorda utilizadas como arma electoral y sin respaldo probatorio justificado contra el PNV a fin de restarle liderazgo en las urnas», añade.
No obstante, advierte que los intentos por «desacreditar al PNV por estas vías, que rayan la injuria, han resultado baldíos» y considera «curioso» que sea el PP quien «pretenda convertirse en dedo acusador de la corrupción».
«Las torpes maniobras de Iturgaiz afectan más a Feijóo que a los nacionalistas. La distancia entre ambos partidos sigue siendo insalvable al día de hoy», indica, para añadir que el PP continúa así «desnortado». «En Euskadi, su inconsistencia y su histrionismo discursivo le mantendrán en la marginalidad. Y en el Estado, atenazado por las presiones de la derecha económica y mediática, la alternativa de Núñez Feijóo empieza a hacer aguas y desinfla sus expectativas», concluye.