Según los expertos de la firma M&M Asesoría y Gestión, un emprendedor es la persona que busca desarrollar sus ideas.
Por lo general, tiene una relación muy cercana o incluso implicaciones personales con la actividad que va a desarrollar. A menudo coloca el tema económico en un segundo plano.
En términos generales, estos innovadores asumen riesgos con una visión propia del negocio, más allá de la realidad económica del entorno. “Son unos enamorados de su idea”, dicen. Sin embargo, siempre a la hora de emprender un negocio es necesario tener en cuenta unas bases fundamentales para ponerlo en marcha.
Cuáles son los datos clave para emprender un negocio
M&M Asesoría y Gestión es un despacho de expertos asesores que trabaja de forma personalizada con empresas o personas que requieren apoyo en distintos aspectos. Su labor cubre áreas como la contable, fiscal, administrativa, laboral y jurídica, esta última enfocada en el plano mercantil. Adicionalmente, brindan apoyo para la realización de todas las gestiones necesarias para que un negocio funcione.
Como conocedores del entorno económico y jurídico sostienen que para emprender un negocio se tienen que tomar en consideración algunas premisas básicas. Citan a la Cámara de Comercio de España que menciona elementos objetivos que deben considerarse para garantizar el éxito de cualquier iniciativa. Lo primero es concretar la idea para elaborar un plan empresarial.
Esta tarea consiste en conocer y definir las características del mercado, por lo que es necesario realizar un estudio para conocer la situación real actual. En función del diagnóstico toca definir las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades. En este punto, la recomendación de M&M Asesoría y Gestión es ser lo más sincero posible para estructurar un modelo de negocio viable.
Los trámites jurídicos son clave para tener un emprendimiento legal
Una vez que se ha definido el modelo de negocio y se han trazado objetivos concretos, hay que trabajar el aspecto legal y fiscal. Estos pasos son fundamentales para garantizar el funcionamiento formal de la iniciativa y no incurrir en omisiones que pudieran acarrear multas o sanciones más graves. Es lo que se conoce como la estructura jurídica.
Con el modelo claro se decide qué figura legal se amolda mejor al negocio: Autónomo, Sociedad Anónima, Sociedad Limitada o cooperativa. El paso siguiente es elegir el nombre para iniciar los trámites del Registro Mercantil correspondiente. Parte de estos trámites incluye la apertura de una cuenta bancaria que servirá para consignar el capital social de la constitución del emprendimiento.
Los portavoces del despacho M&M Asesoría y Gestión sostienen que los costes y algunos trámites varían en función de la personalidad jurídica elegida. Por ello, hacerse de una asesoría profesional es un punto básico para adelantar todas las gestiones que implica emprender un negocio. De esta manera, se ahorra mucho tiempo y dinero, además de garantizar un comienzo sin obstáculos de ningún tipo.