¿Por qué no tomar café torrefacto?; tener lo bueno del café de especialidad

Remitido

El café torrefacto es uno de los 3 tipos más consumidos en distintos países del mundo, junto al natural, de mezcla y el de especialidad. A pesar de que se sirve en muchos establecimientos, su consumo sigue generando mucha controversia, debido al proceso de elaboración, contrario a lo natural.

Expertos catadores como los de la empresa Nica, explican que este tipo de café es el resultado del tueste de los granos con azúcar. Para ello se usa café del tipo Robusta, que es de inferior calidad que el Arábica. En el tostado el azúcar se derrite y carameliza los granos.

Nica explica por qué no tomar café torrefacto

Nica es una empresa conformada por jóvenes emprendedores cuya misión es poner al alcance del público uno de los mejores cafés del mercado. Para ello procesan los granos de mejor calidad que se producen en Nicaragua y Costa Rica con el fin de distribuir café de especialidad de máxima calidad. Actualmente, empaquetan y comercializan 4 marcas con características propias.

Se trata de Colibrí Azul, Tucán, Guacamayo y Jaguar. También hacen lo propio con barras de chocolate con café llamadas Bean to Bar. Como expertos advierten que el café torrefacto se ha popularizado por ser muy económico. Sin embargo, su consumo está desaconsejado por la Organización Mundial para la Salud (OMS). El organismo multilateral ha advertido la posible presencia de sustancias cancerígenas en el azúcar caramelizado a altas temperaturas.

Otras razones para no consumir este tipo de infusiones es que para su elaboración los fabricantes suelen utilizar los peores granos del mercado. Esto se debe a que su sabor o aroma natural carece de importancia, ya que en el tostado estas características serán alteradas. La OMS también advierte sobre el posible exceso de azúcares (aproximadamente el 15 % del contenido) en este tipo de presentaciones.

Lo mejor es el café de especialidad

Una historia totalmente diferente ocurre con el café de especialidad, la principal propuesta del equipo de Nica. Más que un producto en sí, es un movimiento que se caracteriza por preparar esta infusión con granos cuidadosamente seleccionados y procesados. El fruto ha sido cultivado con prácticas sostenibles y su tostado es totalmente artesanal, sin ningún tipo de añadidos.

En Nica consideran que tomar café de especialidad en lugar de torrefacto es mejor porque aporta tanto a la salud del consumidor como al medioambiente. Este tipo de bebidas ofrece un sabor excepcional, un aroma inconfundible y un perfil sensorial único. Su existencia es producto de un trabajo colaborativo, en el que todos los actores de la cadena de valor son importantes. 

Son características que no existen en el café torrefacto. Un elemento que vale la pena destacar del café de especialidad es que, a pesar de su precio más elevado, la experiencia es significativa. Su diferencia con relación a los productos ‘baratos’ es similar a la que existe entre el mejor vino de autor y una marca genérica.

Las + leídas