El reconocimiento a los sanitarios españoles en primera línea contra el coronavirus, en la categoría de la Concordia, ha sido el momento más emotivo de una inusual ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias, que en su 40 edición ha estado marcada por la pandemia.
Tras el solemne silencio con el que la Familia Real fue recibida por las autoridades y premiados a su entrada al Salón Covadonga del Hotel de la Reconquista –escenario elegido para esta edición en lugar del Teatro Campoamor–, la gala alcanzó su momento más emotivo y simbólico con la entrega del Premio Princesa de Asturias de la Concordia a los sanitarios, que recibieron un unánime aplauso de los presentes en la singular gala, que se ha desarrollado con aforo limitado atendiendo a las recomendaciones sanitarias frente a la COVID-19.
En el Salón Covadonga estuvieron presentes la Familia Real; la Reina Sofía; el presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón; la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo; la presidenta del Congreso, Meritxell Batet; la presidenta del Senado, Pilar Llop; el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes; el presidente del PP, Pablo Casado; y el presidente de la Fundación Princesa, Luis Fernández-Vega, así como los premiados que han decidido asistir. Los Patronos de la Fundación Princesa siguieron la ceremonia desde el Salón Reconquista del mismo hotel junto a familiares de los premiados, con un aforo de 100 personas.
La Princesa Leonor, a punto de cumplir 15 años, optó por una indumentaria más madura, con vestido nude de manga francesa y apliques, acompañado de zapatos de salón con tacón, mientras que la Infanta Sofía se decantó por un vestido verde y zapatos planos. Los Reyes entraron con sus hijas, el Rey con traje azul oscuro y corbata azul claro, y la Reina Letizia con vestido azul oscuro con un hombro semidescubierto.
En su discurso, la Princesa de Asturias subrayó que la pandemia del coronavirus ha supuesto para su generación un aprendizaje del sentido de la responsabilidad y también de la importancia de la solidaridad. «Cuando en momentos como estos intentamos ser responsables y solidarios, nos aseguramos un futuro mejor», ha señalado.
«Si hay algo que mi hermana Sofía y yo hemos aprendido es el sentido de la responsabilidad. Nuestros padres nos lo han enseñado siempre. Y creo que los jóvenes de mi generación también son conscientes de ello», ha dicho en su intervención.
Por su parte, el Rey Felipe VI ha hecho un llamamiento a un «un esfuerzo colectivo, un gran esfuerzo nacional, de entendimiento y de concordia» para superar la crisis que ha causado la pandemia y, al mismo tiempo, ha advertido que la situación exige que todas las instituciones actúen «con la máxima integridad y rectitud, para que el interés nacional prevalezca».
En el 40 aniversario de la Fundación Princesa de Asturias, ha recalcado que ésta ha crecido gracias a la «permanente savia» que ha recibido, igual que la sociedad española, de la Constitución: «un compromiso histórico que garantiza día a día nuestra convivencia democrática, la dignidad del ser humano, y sus derechos y deberes como ciudadano en libertad».
La Real Banda de Gaitas ‘Ciudad de Oviedo’ despidió con el pasacalles ‘El Xarreru’ a los premiados. Pasaban de las 20.00 horas cuando la Familia Real abandonó el salón sin proceder a la habitual convocatoria de la próxima edición de los galardones.
RECUERDO A LOS PREMIADOS AUSENTES
Durante la ceremonia, los discursos y la entrega de premios se ha ido intercalando con la emisión de breves mensajes de los galardonados que, a causa de la pandemia, no han acudido a la cita.
Así, el CEO de ‘Gavi, the Vaccine Alliance’, Seth Berkley, ha agradecido el premio y ha puesto en valor la misión de la alianza que representa, encaminada a lograr un acceso «rápido, justo y equitativo» a las vacunas, especialmente ahora a las que se aprueben para luchar contra la COVID-19. «Recibir un respaldo público tan estimado con este Premio solo sirve para fortalecer esa determinación y hacer más profundo el sentido de orgullo por esa misión», ha dicho.
El galardonado con el Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales, Dani Rodrik, ha saludado a los asistentes a la ceremonia y ha hecho una reflexión sobre la globalización, señalando que la pandemia «es un ejemplo devastador de lo sesgadas que estaban las prioridades de los diseñadores de la globalización». Ha apelado a lograr una globalización «que ayude a las sociedades a gestionar sus desafíos tanto económicos como no económicos, dejando de lado el nativismo visceral y la xenofobia».
El compositor John Williams, premiado junto a Ennio Morricone con el Princesa de Asturias de las Artes, ha lamentado no poder acudir a la ceremonia y se ha mostrado agradecido por esta distinción. «El hecho de que mi música pueda ser apreciada en otras partes del mundo es una bendición más allá de cualquier cosa que pudiera haber anticipado», ha dicho, para después tener un recuerdo para el fallecido Morricone.
Finalmente la galardonada con el Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica, Ingrid Daubechies, ha pedido que este premio «inspire a muchos jóvenes a ver la diversión, la alegría, la belleza, la emoción que hay en las matemáticas y a estudiar matemáticas mientras construyen su propia vida». Agradeciendo el premio, Daubechies ha señalado que espera visitar España «en otro momento».