El expresidente de la Generalitat y eurodiputado de Junts, Carles Puigdemont, ha defendido su acción internacional para dar a conocer la situación política y económica en Cataluña y ha negado haberse reunido «con ningún dirigente, exdirigente o persona representante de la Federación Rusa».
Lo ha dicho en un artículo en ‘La Vanguardia’ recogido por Europa Press, después de que este martes el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, acusara a Puigdemont y su entorno de haberse reunido con personas vinculadas al Gobierno de Vladimir Putin creyéndose «James Bond», lo que provocó una nueva crisis entre los socios del Govern.
Puigdemont ha asegurado que en ninguna de sus reuniones con dirigentes y representantes de gobiernos de todo el mundo, en sus palabras, se ha abordado el escenario del reconocimiento de una hipotética Cataluña independiente, aunque ha matizado que este es uno de sus objetivos «para culminar el proceso de independencia».
«Sería muy difícil explicar que quieres la independencia, pero esperas que el reconocimiento caiga por generación espontánea. Sin embargo, en todos los casos mi objetivo era y es ampliar el conocimiento internacional de la realidad del conflicto», ha añadido.
Puigdemont ha asegurado que todo lo que «salga de este esquema es pura fantasía y especulación» contra el movimiento independentista, y ha sostenido que el catalanismo siempre ha estado comprometido con la libertad.