El Diazepam es una fórmula que pertenece a la familia de las benzodiacepinas y tiene efecto ansiolítico, anticonvulsionante, relajante, relajante muscular y sedante.
Más conocido por su nombre comercial Valium, actúa promoviendo la inhibición en el cerebro a través de la sustancia llamada GABA. Este neurotransmisor en uno de los que permite a las células cerebrales comunicarse entre sí.
Expertos de lafarmacia.es dicen que se usa contra la ansiedad y agitación. Su acción miorrelajante (relajante muscular) suele ser muy útil en casos de contracturas musculares o también espasmos a consecuencia de parálisis cerebral y paraplejia. El Diazepam se emplea en personas con síndrome de abstinencia de alcohol.
Cuál es la administración recomendada del Diazepam
Al tratarse de un medicamento que tiene una acción poderosa sobre el Sistema Nervioso Central (SNC), su venta está restringida y solo se entrega bajo prescripción médica. La presentación de este fármaco viene generalmente en pastillas, por lo que su administración es vía oral. Para uso hospitalario, los laboratorios han creado una versión líquida que se inyecta vía intravenosa.
La intensidad y la extensión de los tratamientos con el Diazepam debe gestionarse con mucho cuidado. En primer lugar, porque es una fórmula que puede llegar a producir tolerancia. Esto significa que el paciente progresivamente irá necesitando una dosis más fuerte y prolongada para sentir sus beneficios.
En segundo, la sobredosis con estos medicamentos produce otras consecuencias negativas. Los médicos especialistas recomiendan que un tratamiento con este fármaco no debe extenderse por más de 4 o 6 semanas. Si se emplea de forma puntual, se obtendrán todos los beneficios sin los efectos secundarios de una sobre medicación.
Cuáles son los efectos secundarios del Diazepam
Los expertos insisten que el Diazepam es una sustancia de sumo cuidado que solo debe administrarse bajo estricta supervisión médica. Esto se debe a que sus efectos secundarios pueden llegar a ser muy peligrosos, como la depresión respiratoria y la apnea. Estas se relacionan con una sobre dosificación o una administración demasiado rápida e intensa.
Otros efectos adversos de esta benzodiacepina de acción prolongada se derivan de la depresión del SNC. Los expertos mencionan por ejemplo somnolencia, vértigo, mareos, bradicardia, torpeza y alteraciones como insomnio, ansiedad, irritabilidad, ataxia y otros cambios en el comportamiento. En algunos casos se pueden presentar problemas en el sistema digestivo, retención o incontinencia urinaria, náuseas, visión borrosa o incluso ictericia leve.
Desde LaFarmacia.es recomiendan usarlo solo si lo prescribe un médico y siguiendo sus instrucciones, y hay que consultar con su farmacia de confianza en caso de duda al respecto.