The Last of Us ha vuelto a las hostilidades de su mundo postapocalíptico. Joel y Ellie están buscando a Tommy y durante su largo camino tienen que enfrentarse a nuevas y temibles amenazas.
En el cuarto capítulo, los protagonistas llegan hasta Kansas City, ciudad tomada por los supervivientes civiles que han derrotado a FEDRA. La líder de este grupo conocido como los Cazadores, Kathleen, y uno de los guerrilleros principales, Perry, están rastreando a Joel y Ellie, a quienes creen mercenarios de su enemigo acérrimo, Henry. Sin embargo, lo que descubren es algo terrorífico en el sótano de un edificio. El suelo está destrozado. Y lo que es peor, moviéndose violentamente.
Algo quiere salir desde el subsuelo. «¿Cuándo se lo decimos?», pregunta Perry. «Todavía no. Solucionemos lo que tenemos entre manos, nos encargaremos de esto después», responde Kathleen. Pero, pese a la insistencia de la mujer, es probable que no tengan más remedio que enfrentarse a ello antes de tiempo.
Y es que lo que se esconde bajo tierra es, salvo sorpresa, lo que en el videojuego se conoce como un Gordinflón (Bloater). Esta es la cuarta fase de los infectados, personas que han pasado tanto tiempo albergando el Cordyceps que el hongo les ha recubierto todo el cuerpo. Esto los hace mucho más resistentes y difíciles de matar.
En el tráiler de la serie ya se dejó ver una de estas criaturas saliendo del suelo. Y en el videojuego hay un momento que se sitúa en Pittsburgh -que es la subtrama que el proyecto de HBO está adaptando actualmente, cambiando la localización por Kansas City- en el que un Gordinflón sale desde el suelo de un hotel. Por lo tanto es asumible que ocurra lo mismo en el próximo episodio de la serie.
Lo que aún no se sabe es si los Cazadores saben de la existencia de este Gordinflón y lo mantienen atrapado, o si ha llegado desde lejos. Por la actitud de Kathleen y Perry al entrar a la sala, la primera opción parece la más viable. Pero, si lo mantenían atrapado, sigue existiendo la duda de si lo hacían para utilizarlo como arma o si fueron incapaces de matarlo y no les quedó otra opción que sepultarlo.
En cualquier caso, en cuanto el infectado salga a la superficie parece inevitable que el caos se extenderá por toda la ciudad. Y sin su camioneta, Joel y Ellie tendrán que ingeniárselas para mantenerse a salvo tanto de él como de los propios Cazadores. Para ello habrá que esperar hasta el quinto episodio de The Last of Us, que se estrena un poco antes de lo habitual: el viernes 10 de febrero a las 21 horas de Estados Unidos (horario de Nueva York), es decir, la madrugada del sábado 11 de febrero en España.
