Los trabajadores de la prisión de Dueñas (Palencia) han encontrado en la celda de Norbert Feher, conocido como ‘Igor el Ruso’, una nota de tono presuntamente amenazante tras protagonizar una agresión con un azulejo ante su negativa a ser trasladado para ser juzgado por el triple asesinato de 2017, lo que provocó lesiones en cuatro funcionarios.
Según han informado a Europa Press fuentes penitenciarias, ‘Igor el Ruso’ escondía en su celda un azulejo de corte afilado que utilizó de forma agresiva contra los cuatro funcionarios que, con el equipamiento de máxima seguridad, participaron en el traslado de la prisión de Palencia a Zaragoza, donde este lunes está citado para el juicio por el triple asesinato cometido en 2017.
Feher es un criminal de origen serbio que se sienta en el banquillo para ser juzgado por los asesinatos de un ganadero y dos guardias civiles en Andorra (Teruel). Estas muertes tuvieron en vilo en 2017 a los vecinos de varios municipios debido a que, hasta su detención, se escondió en masías aisladas de zonas habitadas.
En su celda se han requisado varias notas tanto en español como en italiano con mensajes como: «Primera parte completado» y «El tiempo solo es una ventana, la muerte no es más que una puerta. Regresaré y os buscaré a cada uno de vosotros». También han hallado una cuartilla llena de códigos en los que se repite una secuencia con los números cero y uno.
‘Igor el Ruso’ es un preso sometido al grado de vigilancia más restrictivo dentro del régimen cerrado, de acuerdo al artículo 10 de la Ley General Penitenciaria, según explican las citadas fuentes. Al ser trasladado con motivo de la citación judicial, hirió a cuatro funcionarios de prisiones, que fueron atendidos por contusiones en un dedo y esguince cervical.
En febrero de 2020, la Audiencia Provincial de Teruel condenó a Norbert Feher a una pena de 21 años de prisión por dos delitos de tentativa de homicidio y uno de tenencia ilícita de armas tras reconocer que el 5 de diciembre de 2017 disparó varias veces a Manuel Andreu y Manuel Marcuello, dos vecinos de Albalate del Arzobispo (Teruel), resultando heridos. También admitió que introdujo un arma de forma ilegal en España.
La Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP) denunció esta agresión de ‘Igor el Ruso’ en un comunicado en el que explicaban que el incidente había requerido la personación de los jefes de Servicio y que el preso amenazó a los funcionarios con que los mataría, ya que sus muertes «le salen gratis».
APFP ha reclamado al Ministerio del Interior el reconocimiento de los trabajadores penitenciarios como agentes de la autoridad, la adecuación de los medios coercitivos al siglo XXI con la aprobación de pistolas táser y un incremento de las plantillas para ajustarlas a las necesidades reales de los centros penitenciarios para minorar las agresiones que padecen los trabajadores penitenciarios, así como una actualización retributiva con la equiparación salarial con los compañeros de Cataluña, concluyen.