La vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera ha afirmado que España apoya el plan para reducir el consumo de gas en la UE y ha reconocido que el acuerdo requerirá «esfuerzos», pero en el caso de España, donde la reducción del consumo estará en torno al 7%, «no afectará a nuestra calidad de vida diaria». No obstante ha advertido de que «tenemos que prepararnos para un escenario de cero envío de gas» por parte de Rusia.
«Es una situación de crisis muy importante, una situación de crisis energética global donde Europa se pone en pie y dice que no va a aceptar el chantaje de Putin y por tanto tenemos que prepararnos para un escenario de cero envío de gas. Es cierto, que este escenario a España no le afecta en un principio, porque nuestro abastecimiento viene por otras vías, pero también es cierto que nos afecta en cascada por el precio y porque hemos decidido que vamos a trabajar juntos unidos y de forma solidaria» ha argumentado la ministra.
Los 27 países de la UE se han comprometido esta semana a reducir un 15% el consumo de gas, aunque se contemplan excepciones, entre las que figura España, cuya bajada será de en torno al 7%.
La vicepresidenta tercera ha explicado en el programa ‘Espejo Público’ Antena 3 que lo que se aprobó «es que no compute en el total de gas que se atribuye a España aquello que transferimos a otros países o aquello que tenemos que utilizar para la producción de electricidad en momentos de tensión en los que no podemos utilizar otras tecnologías».
Ribera había criticado la propuesta inicial de Europa, en la que no se contemplaban excepciones, porque «no era efectiva, era injusta y ni siquiera eficaz». Para la vicepresidenta tercera, el «valor añadido» de España es ser «el centro de logística desde donde facilitar mayor acceso al gas a la Europa central y del norte».
La ministra asegura que el resultado alcanzado en Bruselas «es muy importante» y demuestra que «Europa quiere ser solidaria y trabajar juntos en momentos complicados. Si alguien necesita ayuda se la debemos dar de la manera más eficaz y eficiente».
AHORRO EN ESPAÑA
La ministra confirmó que, de cara al invierno, en España se deberá reducir el consumo del gas entorno al 7%, realizando un gasto energético «lo más inteligente posible».
En su opinión hay «muchas cosas» que todos sabemos y podemos hacer pero «debemos incorporarlo como habito cotidiano, como acto reflejo», como apagar las luces o bajar las persianas.
«De cara al otoño y al invierno, tenemos que incorporar otras medidas que faciliten flexibilidad en el uso de la energía. Si se puede sustituir gas por electricidad, tanto mejor; si podemos desarrollar a toda velocidad el empleo del biogás mezclado con gas, tanto mejor», explicó.
«Son medidas que requieren un esfuerzo, pero que no afectan a la calidad de vida o al modo en que estamos acostumbrados a manejarnos en el día a día, mas allá de tener incorporado este tipo de hábitos que con el tiempo habíamos perdido, porque nos habíamos acostumbrado a que la energía era algo prácticamente ilimitado, y eso no es así», indicó la ministra.
A LA ESPERA DEL INFORME DEL OPERADOR.
En este punto descartó, de momento, la prolongación de la vida de la central térmica de As Pontes, en proceso de cierre, hasta que el operador del sistema eléctrico Red Eléctrica ofrezca un informe técnico sobre las garantías del suministro.
El Gobierno aseguraba hace unos días que se plantearía prorrogar la vida de la central térmica de As Pontes si Red Eléctrica consideraba que, con el escenario abierto a raíz de la invasión rusa de Ucrania, sería útil para garantizar el 100% del suministro.
A este respecto, Ribera aseguró que han consultado al operador del sistema eléctrico acerca de los escenarios de garantía de suministros «y todavía no nos han contestado».
«En principio, los escenarios que se manejaban, incluso con alguna tensión, es que no necesitamos que As Pontes entre en funcionamiento de nuevo», aseguró Ribera, quien advirtió de que, no obstante, los mercados del carbón también están «muy tensionados» y su precio es a veces superior al del gas «sumándose además el del CO2».
«Afortunadamente, nosotros tenemos un parque de generación que nos permite funcionar en principio, salvo que hubiera una acumulación de catástrofes e imprevistos, sin que As Pontes tenga que volver a abrir alguno de sus grupos», justificó.
En lo referido a las plantas nucleares, la ministra asegura que lo importante es que las desmantelaciones de realicen de forma segura y se asegure una capacidad de entrada alternativa.
Respecto a la relación con Argelia, Ribera aseguró que las relaciones con ese país son «históricas», trascendiendo de los momentos «puntuales» en los que se pueda producir tensión.
«Creo que Argelia es un país fiable, que mantiene sus obligaciones contractuales, incluidas las de invertir en un compresor que ha permitido incrementar la capacidad de bombeo a través del gasoducto que llega a Almería», explicó la vicepresidenta tercera del Gobierno.
Asimismo, señaló la intención de la empresa estatal argelina Sonatrach de maximizar el precio de venta de gas a España en la revisión de los contratos, algo que se dirime en la mesa de negociación que mantiene con las empresas gasistas españolas.