El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha calificado de «intento de atropellar la democracia» por parte de la «derecha jurídica» el hecho de que el Tribunal Constitucional haya convocado un pleno de urgencia para discutir los recursos de PP y Vox a la ley que suprime el delito de sedición, reforma el de malversación modifica la elección de los dos magistrados del tribunal de garantías que corresponde nombrar al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
«Estamos ante un intento de atropellar nuestra democracia por parte de la derecha, no solo la política sino la jurídica jaleada por la derecha mediática y esto es inaceptable», ha resumido lo ocurrido este jueves en España desde Bruselas, donde ha participado en el Consejo Europeo.
Dicho esto, ha garantizado a los españoles en hasta tres ocasiones que «la Constitución y la democracia prevalecerán» y lo harán, ha puntualizado en una de ellas, «frente a cualquier intento de atropello, sean los magistrados conservadores, la derecha mediática o una derecha política que ha intentado esta operación incalificable».
El presidente del Gobierno ha puesto el acento en el hecho de que el PP ha presentado un recurso contra el proyecto de ley del Gobierno y «de manera inmediata, por primera vez en más de 40 años, el Tribunal Constitucional convoque un pleno con urgencia» para tratarlo. «Hombre, está todo dicho», ha aseverado, incidiendo en que «lo que se espera del Tribunal Constitucional es que impere el sentido común y que impere la Constitución».
Sánchez también ha acusado a la derecha y la ultraderecha de haber intentado «amordazar al Parlamento para mantener el bloqueo de una institución tan importante para el funcionamiento de la democracia como el Tribunal Constitucional» igual que han venido haciendo en lo últimos cuatro años con el CGPJ.
«Han sido capaces de secuestrar la Constitución durante estos cuatro años, han intentado bloquear el Parlamento y una votación en el día de hoy, algo que no había ocurrido en 40 años de democracia y la pregunta que hay que hacerse es ¿por qué?», ha proseguido en su argumentación.
COMPLOT BURDO
Pese al «complot tan burdo» por parte de la derecha y la ultraderecha que se ha visto hoy, el Congreso finalmente ha podido llevar a cabo su votación, ha destacado, subrayando que «a pesar de estos acontecimientos España es una de las principales democracias de Europa».
Asimismo, ha advertido tanto a PP como a Vox de que tienen que entender el mensaje de que «no todo vale, no ser puede tildar a un Gobierno emanado de las urnas, del Parlamento, como ilegítimo, criminal y golpista».
Esto, ha dicho, es lo que se ha escuchado en los últimos cuatro años por parte de «partidos políticos que no tienen más allá del insulto ningún proyecto que ofrecer a los españoles».
Sánchez ha echado en cara a la oposición que con el «uso de palabras tan gruesas» como las que dirige hacia el Ejecutivo al hablar de golpe de Estado, de golpismo y de Gobierno ilegítimo y criminal, se está «banalizando».
«¿Quién da más? ¿Cuál es el siguiente?», ha preguntado en tono irónico, tras denunciar que es una tónica que se repite tanto con Vox como con el PP de Pablo Casado y ahora de Alberto Núñez Feijóo.
«Quedan pocos epítetos y lo más importante es reivindicar y reclamar el respeto no solo frente al insulto sino de la voluntad popular», ha esgrimido, subrayando que lo que tiene que hacer el PP es «reconocer el resultado de las elecciones y asumir que está en la oposición y asumir la tarea y su deber de cumplir con la Constitución». En definitiva, ha resumido, «lo que hay que hacer es respetar la democracia y en una democracia los poderes emanan del pueblo».
Por otra parte, ha rechazado la «excusa» de la celeridad con la que se ha tramitado esta ley en el Congreso, defendiendo que ha sido una tramitación parlamentaria que «se ajusta a los procedimientos del reglamento» de la Cámara Baja y ha asegurado que ningún líder europeo le ha preguntado por toda la polémica en España.