La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cuca Gamarra, ha exigido este jueves que el nuevo presidente del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno, José Luis Rodríguez Álvarez, comparezca en la Cámara para explicar los motivos del cese de dos de sus miembros, uno de ellos Javier Amorós, quién ejerció como presidente en funciones del organismo durante tres años.
«Llega el control al Consejo de Transparencia para tapar sus abusos con lo público», ha denunciado Gamarra a través de un mensaje en su cuenta de Twitter, al que adjunta la noticia del diario ‘ABC’ en la que se informa de las citadas destituciones.
Los cesados son Esperanza Zambrano, subdirectora general de Reclamaciones, y Javier Amorós, quien ejerció como presidente en funciones del organismo tras el fallecimiento de Ester Arizmendi en noviembre de 2017. Zambranó dejó el Consejo hace ya unas semanas pero ‘ABC’ informa de que Amorós aún no lo ha hecho y podría reconsiderarse su salida.
SÁNCHEZ, ENEMIGO DE LA TRANSPARENCIA
El PP ve la mano de presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras estas destituciones. El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Montesinos, se ha referido al jefe del Ejecutivo como «enemigo número uno de la transparencia». «Purga el Consejo de Transparencia para impedir que le siga investigando», ha añadido en un mensaje de Twitter en el que proclama que «los españoles se merecen un Gobierno que diga la verdad».
Ante este panorama, el PP ha registrado un escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, para que Rodríguez Álvarez «explique y justifique» ante la Comisión de Política Territorial y Función pública «los ceses y nombramientos en el organigrama del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno». Ciudadanos también ha hecho lo propio aunque ha solicitado su comparecencia ante la Comisión de Calidad Democrática.
ENCONTRONAZOS CON EL GOBIERNO
Estos ceses se producen después varios encontronazos entre el Consejo de Transparencia y el Gobierno. En los últimos tiempos, el organismo ha aprobado resoluciones para que el Ejecutivo hiciera públicos datos sobre desplazamientos del presidente Pedro Sánchez en el Falcon presidencial o diera a conocer los nombres de los expertos que le asesoraron durante la primera ola del coronavirus y la desescalada.
Además, las destituciones han tenido lugar tres meses después del desembarco en el organismo de Rodríguez Álvarez, un alto cargo de la Administración Zapatero. Entró en Moncloa en abril de 2004 como director del Gabinete del secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, entonces Fran Caamaño, y luego fue nombrado director general de Coordinación Jurídica en el Ministerio de la Presidencia, cargo que ocupó hasta febrero de 2009, cuando Caamaño se convirtió en ministro de Justicia y se lo llevó de director de gabinete.
Después el Gobierno le eligió como director de la Agencia de Protección de Datos, responsabilidad que desempeñó entre junio de 2011 y 2015, conviviendo con el Ejecutivo de mayoría absoluta de Mariano Rajoy, que no podía relevarlo hasta terminar su mandato de cuatro años.
