Sánchez se queja de una «burbuja» en su contra: «El problema es que no tienen nada contra mí, soy un político limpio»

Redacción

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha negado este martes que se haya producido un cambio en la posición de España respecto a Marruecos y el Sáhara Occidental, al tiempo que ha asegurado que esta aproximación es la misma que mantenía España con sus antecesores en La Moncloa, Mariano Rajoy (PP) y José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE).

«Niego la mayor», ha señalado al ser cuestionado sobre este cambio de posición y a renglón seguido ha indicado que España mantiene «la misma posición» sobre el Sáhara Occidental que cuando gobernaban Rajoy y Zapatero.

Además, ha señalado que las propuestas que le ha escuchado al candidato del PP a las elecciones generales, Alberto Núñez Feijóo, coinciden con lo que ya está haciendo su Ejecutivo en esta materia. Así ha indicado que Feijóo habla de una solución que encaje dentro de la posición que sostiene Naciones Unidas y en línea con las principales potencias mundiales.

«Eso es lo que está haciendo el Gobierno de España», se ha defendido Sánchez, que asegura que su posición es «perfectamente compatible» con Naciones Unidas y es la misma de aliados internacionales como Alemania, Francia, Países Bajos o Estados Unidos.

CARTA A MOHAMED VI HACE UN AÑO

En marzo de 2022, Pedro Sánchez envió una carta al rey de Marruecos en el que señalaba que «España considera la propuesta marroquí de autonomía (para el Sáhara) presentada en 2007 como la base más seria, creíble y realista para la resolución de este diferendo». La oposición le acusó de dar un giro de 180 grados en la tradicional política hacia la antigua colonia y abría una nueva etapa en la relación con Marruecos.

Sin embargo, desde el Gobierno han venido negando el giro estratégico e insisten en que se mantiene la «centralidad» de la ONU en la búsqueda de una solución mutuamente aceptable por las partes, Marruecos, por un lado, y el Frente Polisario, en representación de los saharauis por otro.

Por otro lado, al ser cuestionado sobre si este cambio de postura está relacionado con el hackeo del teléfono móvil del presidente con el software Pegasus, ha afirmado que es una de las «maldades» que plantea la derecha y algunos medios conservadores y que a su juicio forma parte de la burbuja del sanchismo.

HACKEO DEL MOVIL CON PEGASUS

En este sentido se quejó de que Feijóo afirmase que no hay información sobre qué datos se sustrajeron del móvil del presidente y por otro lado ha lamentado tener que escuchar informaciones como que el cambio de posición con Marruecos respondía a que su mujer pertenecía a una red de narcotráfico en este país.

«El problema es que hoy no tienen nada contra mí, soy un político limpio», ha defendido el presidente, que considera que se utiliza de manera «insidiosa» el argumento de que existe alguna información en su teléfono que ha debilitado la posición de España y por eso se ha producido el cambio de posición sobre el Sáhara.

Sánchez lo ha negado y lo ha situado como parte de la «burbuja» en su contra por parte de los medios conservadores y los partidos de derecha y ultraderecha.

Además, ha contratacado señalando que quien tuvo problemas con su teléfono móvil fue el anterior presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que envió un SMS de apoyo «a un corrupto como fue (Luis) Bárcenas», en referencia al extesorero del PP, condenado por corrupción.

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