El sindicato de Enfermería (Satse) ha denunciado que la ministra de Sanidad, Carolina Darias, vaya a abandonar su cargo en próximas fechas con diez «grandes asignaturas suspensas» relativas a la mejora de las condiciones profesionales y laborales de las 400.000 enfermeras y fisioterapeutas.
Así, la organización sindical ha hecho balance de la gestión de Darias, una vez que todas las informaciones apuntan a que su salida del Ministerio de Sanidad se producirá «en breve», y ha concluido que, además de «incumplir» distintos compromisos adquiridos con las enfermeras y fisioterapeutas, ha hecho «oídos sordos» a distintas propuestas e iniciativas que se le han planteado para avanzar en el desarrollo profesional y laboral de dos colectivos sanitarios «imprescindibles y esenciales» para mejorar el presente y futuro de la sanidad de España.
«El primer asunto sobre el que, no solo no ha tratado de impulsar, sino que ha dinamitado, es la tramitación parlamentaria de la Ley de Seguridad del Paciente-ratios enfermeras. El PSOE lleva meses impidiendo su avance en el Congreso de los Diputados y Carolina Darias, en junio de 2023, se comprometió con Satse a desbloquearlo, pero, transcurridos ya ocho meses, no ha hecho absolutamente nada al respecto», ha detallado el sindicato.
Otras demandas de los profesionales de Enfermería y Fisioterapia que siguen «sin ningún tipo de solución» por parte del Ministerio de Sanidad y del Gobierno son la posibilidad de acceder a la jubilación anticipada y voluntaria, ya que sus condiciones laborales son «especialmente penosas, peligrosas e insalubres», y la reclasificación profesional en el Grupo A, sin subgrupos, para acabar con la «grave discriminación» que sufren desde hace muchos años.
«De igual manera, la ministra de Sanidad ha metido en el cajón de su despacho distintas propuestas de Satse en beneficio de la profesión y del sistema sanitario, como la aprobación de una Ley que aborde de manera integral, conjunta y coordinada el grave problema de las agresiones a los profesionales sanitarios; y la puesta en marcha de un Plan de estabilidad y retorno de los profesionales que se han visto obligados a emigrar en los últimos años a otros países en busca de unas mejores condiciones laborales y profesionales», ha lamentado.
Del mismo modo, prosigue, la demanda de aumentar las plazas universitarias del Grado de Enfermería para colaborar a medio y largo plazo en acabar con el «déficit estructural y crónico» de plantillas enfermeras que sufre España también «duerme el sueño de los justos», al igual que la puesta en marcha de un Observatorio de la imagen de la mujer en el ámbito sanitario, para acabar con comportamientos, actitudes e imágenes estereotipadas, sexistas y retrógradas.
Otros avances para las enfermeras, fisioterapeutas y la sanidad en su conjunto que también han caído «en saco roto» son la creación, dentro de la estructura orgánica del Ministerio, de una Dirección General de Cuidados y Humanización, cuya responsabilidad recaiga en una enfermera; potenciar y mejorar el Plan de Atención Primaria impulsado desde su departamento, e impulsar la colaboración e interlocución entre los representantes de los profesionales y el Ministerio, a través de la Conferencia Enfermera y el Foro Profesional.
«En el balance del debe y del haber de la ministra de Sanidad, lamentablemente se ha constatado que ganan ‘por goleada’ todas las actuaciones, medidas y compromisos no realizados o incumplidos, con lo que se han perdido dos años ‘clave’ para avanzar en la mejora de la Sanidad y de las condiciones de las enfermeras y fisioterapeutas de España», han zanjado desde la organización sindical.