El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el mandatario estadounidense, Joe Biden, han acordado que equipos técnicos de ambos países se reúnan «cuanto antes» para poder avanzar en el proceso de limpieza de tierras contaminadas en Palomares (Almería). Asimismo, ha celebrado la «receptividad» mostrada por Biden en torno a la cuestión de los aranceles a la aceituna negra.
Estas eran dos de las cuestiones que Sánchez quería plantear a Biden en su encuentro de la Casa Blanca y que más expectación habían generado, en el caso de la primera porque es un problema que colea desde hace casi seis décadas, y en el caso de la segunda por el importante impacto económico que tiene para el sector aceitunero. Sin embargo, el presidente no ha conseguido arrancar ningún compromiso concreto.
Respecto a Palomares, donde el accidente entre dos aviones estadounidenses en 1966 y la caída de cuatro bombas termonucleares provocó contaminación por plutonio, Sánchez ha explicado que el principal «avance» ha sido que ambos han dado instrucciones para que «equipos técnicos se reúnan cuanto antes para que de una vez por todas poder extraer estas tierras contaminadas y poder sacarlas de España».
El presidente ha incidido en que el encuentro ha puesto de manifiesto la «voluntad de resolver este problema» y ha confiado en que con ello se pueda solucionar «de forma definitiva esta cuestión», sin entrar en más detalles sobre posibles plazos.
Sánchez ha confirmado así lo adelantado el miércoles por el secretario de Estado, Antony Blinken, tras reunirse con el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, quien dijo que «pronto» se iban a reanudar las negociaciones sobre esta cuestión.
El Gobierno envió el pasado mes de marzo, a través del Ministerio de Asuntos Exteriores, una petición formal a la Administración Biden para que procediera a la retirada de las tierras contaminadas conforme a una declaración de intenciones alcanzada en 2015 con Mariano Rajoy en Moncloa y Barack Obama en la Casa Blanca.
En octubre de 2015, el entonces secretario de Estado, John Kerry, y el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, firmaron en Madrid una declaración de intenciones en la que ambos países se comprometieron a una «rehabilitación mayor» del entorno de Palomares y a acometer el traslado de tierra contaminada a un «emplazamiento adecuado» en Estados Unidos.
RECEPTIVIDAD RESPECTO A LA ACEITUNA NEGRA
Por lo que se refiere a los aranceles sobre la aceituna negra, «un elemento de fricción en unas relaciones que calificaría de extraordinarias», Sánchez ha explicado que ha encontrado «receptividad» en Biden, al tiempo que ha recordado que «es una cuestión que está ahora mismo en la Organización Mundial de Comercio (OMC), que ha sido clara»
«He encontrado receptividad por parte de la Administración Biden para poder resolver esta cuestión», ha señalado, recordando que se trata de «uno de los contenciosos» que se arrastran de la anterior Adminitración de Donald Trump.
Estados Unidos impuso un arancel del 35% a la aceituna negra en 2018 y pese a que la OMC dictaminó en 2021 que era ilegal Washington no ha revertido aún la medida. El pasado mes de marzo, el ministro de Agricultura, Luis Planas, dijo que iba a pedir a la Comisión Europea que llevara de nuevo la cuestión ante la OMG, toda vez que las competencias en materia comercial están cedidas a Bruselas.