Solo un 56 por ciento de las personas con migraña en España recibe un diagnóstico adecuado de la enfermedad, según datos de la ‘Encuesta Observacional de la Epidemiología, tratamiento y cuidado de la migraña’, realizada por Lilly en una población en España de más de 95.000 personas entre octubre de 2020 y febrero de 2021, y que ha sido presentada en la LXXIV Reunión Anual de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
El objetivo del trabajo ha sido analizar las características de los pacientes con migraña que iniciaban tratamiento preventivo con galcanezumab (‘Emgality’) en práctica clínica habitual en España, sus patrones de tratamiento, la efectividad y la persistencia al tratamiento.
«La mayoría de las personas con migraña, cuando sufren una crisis, van al hospital y consultan al médico, no se quedan en casa y, a pesar de ello, los datos señalan que 1 de cada 2 no ha recibido un diagnóstico adecuado de migraña. La mayoría de estos pacientes no diagnosticados había consultado a nivel asistencial al médico de Atención Primaria, a su farmacéutico y a urgencias, pero menos del 15 por ciento había consultado a un especialista en neurología. Los resultados obtenidos nos indican que el diagnóstico de la migraña se debería poder hacer perfectamente en el primer nivel asistencial y, sin embargo, todavía no es conocido por parte de los profesionales», ha dicho el médico especialista de Neurología en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla y catedrático de Neurología, Julio Pascual.
Asimismo, el jefe del Servicio de Neurología del Hospital Clínico Universitario de Valencia y presidente de la Sociedad Española de Neurología (SEN), José Miguel Láinez, ha recalcado que la falta de diagnóstico adecuado de los pacientes con migraña es el principal problema al que nos enfrentamos actualmente. Sin embargo, a su juicio, si los pacientes logran un diagnóstico adecuado de la enfermedad, podrían tener un seguimiento profesional y un tratamiento adecuado que, sin duda, evitaría en la mayoría de los casos la evolución a migraña crónica y el grave deterioro de la calidad de vida que se produce en esta situación.
Pero no solo los expertos han puesto de manifiesto el infradiagnóstico de la migraña en nuestro país, sino también el infratratamiento en torno a esta enfermedad. Dependiendo de la frecuencia e intensidad de cefaleas al mes, se recomienda a cada paciente un tratamiento que se adecua a sus características, crisis y grado de discapacidad.
Para combatir los síntomas de los episodios agudos de migraña, que pueden llegar a ser muy incapacitantes, los tratamientos más utilizados son los antiinflamatorios no esteroideos (AINE), indicados para las crisis de intensidad leve o moderada. En el caso de que las cefaleas sean de mayor intensidad o que no respondan adecuadamente a los analgésicos habituales, se utilizan los denominados triptanes.
Para los pacientes con crisis frecuentes, es decir, que sufran cuatro o más episodios de migrañas más cada mes, se recomienda además un tratamiento preventivo con el objetivo de disminuir la frecuencia e intensidad de los episodios agudos. Pero es precisamente en los tratamientos preventivos orales habituales donde la persistencia es muy reducida.
Según los resultados del trabajo, los AINE fueron el tratamiento sintomático más utilizado, con independencia del número de crisis por mes de los pacientes españoles con migraña que participaron en el estudio. «El estudio ha demostrado que en España solo 1 de cada 3 personas había tomado triptanes, que es el tratamiento de elección sintomático de la migraña recomendado por las guías de las sociedades científicas. Muchas veces los neurólogos no damos los tratamientos que deberíamos dar, pero si dos de cada tres personas no lo tomaban es porque probablemente muchos pacientes los han utilizado y no cubren todas sus expectativas», ha añadido .
Además, en España la carga interictal (definida como la persistencia de sintomatología en los períodos entre episodios de migraña que afectan en gran medida a la vida social, familiar y laboral de la persona que la padece) fue grave en casi la mitad de los encuestados (46,8%) y aumentó con el número de episodios por mes. Es decir, según las conclusiones del estudio, el tratamiento inadecuado también podría explicar esta importante carga interictal observada.
RECOMENDACIÓN DE TRATAMIENTO PREVENTIVO
Por otro lado, a las personas que sufren más de cuatro días de dolor al mes, se les recomienda el uso de un tratamiento preventivo para controlar la frecuencia de las crisis y hacer que estas sean más leves. De hecho, se calcula que por lo menos un 25 por ciento de los pacientes con migraña debería utilizar tratamiento preventivo.
«Lo más llamativo es que de las personas con 15 días o más de migraña al mes en los que el tratamiento preventivo está claramente indicado, tan solo el 20 por ciento lo estaban recibiendo. Eso quiere decir que los pacientes con migraña frecuente y discapacitante están claramente infratratados en nuestro país. Cuanto antes se utilice el tratamiento preventivo, será significativamente menor la posibilidad de que su migraña se cronifique. Pero los sanitarios no somos conscientes de que tenemos nuevas opciones específicas y muy eficaces para el tratamiento preventivo de la migraña que no se están usando», ha explicado Pascual.
En este sentido, los expertos coinciden en que los tratamientos preventivos orales tradicionales tienen limitaciones y, que actualmente, existen alternativas terapéuticas como son los anticuerpos monoclonales frente al péptido relacionado con el gen de la calcitonina (CGRP), de administración subcutánea mensual. «Los nuevos tratamientos monoclonales son fármacos realmente específicos para el tratamiento preventivo de la migraña y que tienen una mejor tolerabilidad que los tradicionales», ha enfatizado Láinez.
Sobre estos nuevos tratamientos monoclonales, durante el congreso de la SEN, Lilly ha presentado también los resultados del ‘Estudio en Vida Real en Pacientes con Migraña que Inician Tratamiento con Galcanezumab’ (ORYGAM, por sus siglas en inglés), un trabajo retrospectivo, realizado en seis servicios de neurología españoles en 314 adultos con migraña que iniciaron tratamiento con galcanezumab entre noviembre de 2019 y septiembre de 2021, seguidos hasta pérdida de persistencia o fin de seguimiento.
Del total de pacientes, un 85 por ciento eran mujeres, un 80,6 por ciento padecían migraña crónica y un 92,5 por ciento con una media de más de 8 días de migraña al mes durante los tres meses previos al inicio. Además, más del 60 por ciento habían recibido seis o más fármacos preventivos previos.
Los resultados del estudio indican que la mediana del tiempo con este tratamiento fue de 14,6 meses. El cien por cien, el 95,7 por ciento, el 82 por ciento y el 59,8 por ciento de los pacientes fueron persistentes al tratamiento a los 1, 3, 6 y 12 meses, respectivamente. De aquellos pacientes que dejaron el tratamiento durante el periodo de estudio, el 57,6 por ciento lo hizo por falta de efectividad, el 31,1 por ciento por mejoría de la enfermedad y tan solo un 3,3 por ciento por reacciones adversas.
«Son pacientes muy difíciles porque han fracasado a muchos tratamientos preventivos previos y con este estudio demostramos en vida real que la mayoría de los pacientes continuaron el tratamiento con galcanezumab durante más de 1 año experimentando una reducción sostenida de los días de migraña por mes», ha argumentado el neurólogo y jefe de la Unidad de Cefalea del Hospital Universitario y Politécnico de la Fe de Valencia, Samuel Díaz-Insa.