Un agente de la Policía Local ha sido suspendido de empleo y sueldo durante un año, siete meses y quince días por el Ayuntamiento de Alicante tras negarse a usar mascarilla durante el servicio.
«No me voy a poner algo que atente contra mi salud sabiendo que no hay nada», ha recalcado el agente en un vídeo que ha compartido en las redes sociales donde denuncia los hechos. «Esa es la pena por seguir vivo, por seguir sano», afirma Rafael Navarro en un vídeo difundido en las redes sociales.
«Esto es lo que nos separa se seguir siendo un país a ser una mierda. Lo que nos separa de seguir siendo policías a seguir acatando órdenes ilegales. Esto es lo que nos separa a los hombres de los cobardes, un papel escrito por personas de mi gremio», ha expresado el sancionado.
«Mi salud está por delante. Para ellos soy un terrorista biológico, ¿veis por dónde va el miedo?», pregunta el policía a sus seguidores. «Esto es lo que pasa cuando te enfrentas al sistema, el sistema te come. Pues ya pueden empezar a comer, porque yo no me pienso poner la mascarilla. Si dentro de un año, siete meses y quince días la cosa sigue igual, me volveré a ir lo que ellos quieran», advierte.
Navarro recurrirá la sanción y ya ha puesto el caso en manos de su abogado.
El pasado mes de febrero, el propio Navarro denunciaba la situación y en aquel momento se enfrentaba a una condena de 6 años de inhabilitación.