La compañía tecnológica Twitter, dueña de la red social del mismo nombre, cerró 2021 con unas pérdidas netas de 221 millones de dólares (193 millones de euros), lo que supone reducir en un 80,5% los ‘números rojos’ contabilizados durante 2020, según ha informado este jueves la empresa.
La facturación entre enero y diciembre fue de 5.077 millones (4.427 millones de euros), un 36,6% más. De esa cifra, los ingresos por publicidad avanzaron un 40,5%, hasta 4.506 millones (3.929 millones de euros), mientras que los procedentes de licenciar datos y subscripciones se situaron en 572 millones (499 millones de euros), un 12,3% más.
Los usuarios activos diarios en la red social al cierre del cuarto trimestre fueron de 315 millones. Sin embargo, los usuarios activos diarios monetizables fueron 217 millones, un 13% más. Twitter ha atribuido este incremento a las mejoras del producto y a la «conversación global» sobre actualidad. En Estados Unidos, los usuarios monetizables crecieron un 2%, hasta 38 millones, mientras que en el resto del mundo lo hicieron un 15%, hasta 179 millones.
Los costes asociados a los ingresos alcanzaron los 1.797 millones de dólares (1.567 millones de euros), un 31,6% más, al tiempo que los gastos de ventas y marketing fueron de 1.175 millones (1.025 millones de euros), un 32% más, y los generales y administrativos fueron de 584 millones (509 millones de euros), un 3,9% más.
Con respecto a los datos del cuarto trimestre, Twitter obtuvo un beneficio neto de 182 millones (159 millones de euros), un 18% menos que en el mismo periodo de 2020. De su lado, la facturación avanzó un 21,5%, hasta 1.567 millones (1.366 millones de euros).