Una persona ha muerto y alrededor de una veintena han resultado heridas esta madrugada en el Medusa Festival que se celebra en la localidad valenciana de Cullera por la caída de varias infraestructuras como consecuencia de «un inesperado y violento vendaval».
La dirección del Festival ha anunciado en un comunicado la suspensión de los conciertos y el cierre del recinto «como medida preventiva con el fin de facilitar el trabajo a los servicios de emergencia y seguridad».
Sobre las cuatro de la mañana, la localidad de Cullera y otras aledañas «se han visto sorprendidas por inclemencias meteorológicas excepcionales que causaron diversos daños en la infraestructura de nuestro recinto».
La caída de algunas infraestructuras, entre ellas el escenario principal que estaba fuertemente sujeto al suelo, golpeó a varias personas, una de las cuales ha fallecido como consecuencia del impacto y las heridas. La víctima mortal es un joven de 28 años, según han informado los servicios de emergencia.
Desde la organización explicaron que, «desgraciadamente, el fenómeno meteorológico de características devastadoras hizo que algunas estructuras provocaran los inesperados hechos».
Por eso, expresó «todo nuestro apoyo y cariño para los afectados en estos momentos tan duros y tristes». «Estamos completamente desolados y consternados ante lo sucedido la pasada madrugada».
«Nuestros pensamientos están en todo momento con ellos, la dirección de Medusa Festival nos ponemos a su disposición en cuanto necesiten», añadió en otro comunicado tras expresar «nuestras profundas y sinceras condolencias a los familiares y amigos afectados por las fatales consecuencias acaecidas anoche».
Pocas horas antes, el Medusa Festival había disfrutado de algunas actuaciones tras arrancar esta semana con una gran expectación y afluencia de público tras dos veranos de pandemia por el coronavirus.
