Jerry Jouret, un hombre de 81 años, sobrevivió una semana atrapado en su auto bajo la nieve en el estado de California, Estados Unidos. El último 24 de febrero, Jouret llevaba hora y media manejando desde su domicilio en la montaña en Big Pine, cuando accidentalmente terminó en una ruta más corta y su camioneta quedó atascada en un bloque de nieve.
El viaje inicialmente debía durar cuatro horas, pero al quedar atrapado, lejos de caer en la desesperación, puso en práctica lo aprendido en Survivor, una serie que solía ver junto con su esposa. Con una casaca ligera, una colcha delgada y una toalla fue capaz de mantener su temperatura corporal y sobrevivir por casi una semana.
Para alimentarse, el hombre de 81 años, quien además es un exempleado de la NASA, comió nada más que unas galletas y unos croissants que llevaba consigo.
«Todo fue un milagro (…). Nos parecía increíble que un hombre que había hecho tantas cosas en su vida, quedara atrapado en su carro y muriera de hipotermia», le dijo su nieto, Christian Jouret, a la BBC.
Al encontrarse sepulado bajo la nieve, Jerry Jouret apeló a sus conocimientos matemáticos y logró que la batería del carro le durara alrededor de tres días y medio. Para no quedar completamente deshidratado, bajaba la ventana del auto y tomaba un poco de nieve.
«Él logró sobrevivir gracias a nieve, croissants y biscotti», contó su nieto.
Sin embargo, la energía de la batería se agotó mientras Jerry intentaba subir las ventanillas del auto, lo cual lo puso en una situación todavía más vulnerable, sobre todo porque la temperatura alcanzó algunos grados bajo cero.
«Me imaginé que debía tener mucho miedo que este fuera el final de sus días», agregó Christian.
Luego de seis días en esas condiciones, pese a que otros pilotos de aeronaves confundieron su auto con una roca, un helicóptero se acercó al punto donde se encontraba Jerry. Apenas pudieron rescatarlo, lo llevaron de inmediato a un hospital, donde las propias enfermeras se sorprendieron de encontrarlo con sus signos vítales totalmente normales y sin rezagos de hipotermina.
«Yo lloré mucho. No me di cuenta de cuánto damos por sentado la presencia de las personas en nuestras vidas», agregó su nieto.
La oficina del alguacil del condado de Inyo mencionó que el helicóptero vio el auto atascado en la nieve momentos después de rastrear una señal de celular en el área.
«Cuando la tripulación se acercó para inspeccionar, se bajó una ventana y una persona comenzó a saludar desde el interior del vehículo», explicó mediante un comunicado de prensa.
