En Turquía, un hombre descubrió que su esposa le era infiel gracias a una curiosa frase que repetían sus loros.
“Mi marido no está”, era lo que habrían expresado las aves constantemente en ausencia de la mujer.
Por esto, el hombre comenzó a sospechar que su compañera sentimental le era infiel y decidió llevar el caso a los tribunales.
De forma insólita, los loros llegaron al juzgado y se convirtieron en “testigos” del caso, en el que las partes involucradas comparecieron ante la justicia.
Una fotografía que se viralizó en redes sociales da cuenta de este momento, en el que las aves posaron sobre la espalda de uno de sus dueños.