Un robot en Suecia sorprendió al público al debutar como violonchelista en un concierto sinfónico.
Hace algunos años, la idea de ver a robots humanoides integrados en actividades humanas era casi ciencia ficción. Sin embargo, con el desarrollo de modelos como el robot Optimus de Tesla o el Yuanzheng A2 de la empresa china Agibot, los robots han comenzado a realizar tareas antes inimaginables.
Recientemente, un robot fue capaz de ejecutar una intervención odontológica en Estados Unidos, completando el procedimiento en una fracción del tiempo más corta de lo que le llevaría a un humano. Y el campo de la música, este tipo de tecnologías no ha sido ajena, ya que un robot con tres brazos dirigió una orquesta sinfónica en Alemania.
Ahora, un nuevo suceso ocurrió en Suecia, donde un robot diseñado por el compositor e investigador Fredrik Gran tocó el violonchelo junto a la Orquesta Sinfónica de Malmö, en un evento sin precedentes en la música sinfónica. Durante el concierto, el robot se ubicó en un pequeño podio, bajo una luz que atrajo todas las miradas del público.
Este robot, compuesto por dos brazos mecánicos, mostró una precisión sorprendente: con su brazo derecho manejó el arco para crear el sonido y con el izquierdo, formado por una mano circular, presionó las cuerdas en la parte superior del instrumento.