Una mujer de origen británico se enfrenta a una de las decisión más duras de su vida: decidir a cúal de sus dos hijos dona uno de sus riñones
Sarah Bingham, de 48 años y residente Hexham, en el norte de Inglaterra, es madres de Noah, de 20 años, y Ariel, de 16, aquejados de nefronoptisis, una enfermedad genética que causa inflamación y cicatrices en los riñones, y cuya salud se ha deteriorado en los últimos meses, informa la ‘BBC’.
Los órganos de Bingham son compatibles con ambos hijos, pero no los de su marido “Estaba lista para darle un riñón a mi hija y luego mi hijo sufrió insuficiencia renal y también necesita un riñón. Obviamente, solo tengo uno que puedo donar”, comentó la mujer. “Los equipos médicos renales no te presionan (para tomar una decisión), porque te estás arriesgando al donar un riñón. Tienes que tomar esa decisión tú misma“, explicó.
Los problemas para la familia Bingham aparecieron en 2016, cuando Ariel comenzó cansada. Al principio su fatiga fue atribuida al estrés de los exámenes escolares, pero las pruebas en el hospital Royal Victoria Infirmary descubrieron que tenía nefronoptisis.
Los exámenes realizados a sus madre confirmaron que ambas eran compatibles, pero en 2019, su hijo Noah también enfermó y le diagnosticaron la misma condición.
“Obviamente, como madre, cuando tienes dos hijos que necesitan trasplantes de riñón y esperabas darle tu riñón a uno, y de repente el otro también necesita uno, sientes este dilema“, dijo Bingham.
Su hijo está “muy mal”, pero se somete a diálisis con regularidad y se encuentra en una condición estable por ahora. Por otro lado, la función renal de su hija “se ha deteriorado más en el último año” y probablemente será quien primero necesite un trasplante.
La pareja tiene otro hijo, Casper, de 12 años, que está siendo examinado para ver si él también tiene la enfermedad.
La esperanza para la pareja es encontrar otro posible donante compatible con alguno de sus hijos.