La Policía canadiense multó a una mujer que fue sorprendida saltándose el toque de queda impuesto en el país mientras paseaba a un hombre atado a una correa de perro.
A pesar de que en la ciudad la orden entra en vigor a las 20:00 horas de la tarde, los ciudadanos disponen de un tiempo extra para pasear a sus mascotas por los alrededores de sus domicilios, momento en el que la sancionada aprovechó para sacar a un varón atado por el cuello. Cuando los agentes la preguntaron por su comportamiento, la mujer explicó con total seriedad de que «estaba paseando a su perro».
La infractora fue sancionada con una multa de 1.500 dólares canadienses (965 euros), sin embargo aseguró a policía que volvería a salir una vez impuesto el toque de queda, dijo la portavoz de la policía de Sherbrooke, Isabelle Gendron