La vida moderna supone un gran desafío para las relaciones de pareja. El ritmo de vida, la tecnología, las expectativas cambiantes, los roles de género y la incertidumbre del contexto, comprometen el vínculo entre las personas, y más aún cuando hay un proyecto en común tan grande como los hijos. Sostener la comunicación y el entendimiento mutuo se hace complejo, sobre todo cuando se ingresa en un círculo de discusiones y mal ambiente. En este marco, surge Amantes Extraordinarios, un proyecto de coaching de parejas 100% online en el que ayudan a las parejas a resolver problemas que se acumulan con los años las parejas y conectar de nuevo.
Conectar de nuevo con la pareja
Olga Molina y Fran San Miguel son una pareja de coaches que ayudan a parejas que con los años se han convertido en “simples compañeros de piso”. “Les facilitamos herramientas de comunicación y entendimiento para que dejen de lado las discusiones y el mal ambiente familiar, a través del coaching de parejas y nuestros programas de acompañamiento acelerado, únicos en España”, explica Olga. Con sus programas de coaching y acompañamiento, en menos de 2 años han legado a más de 4.000 parejas hispanohablantes.
Llevan más de 20 años dedicados al desarrollo personal y desde 2021, en Amantes Extraordinarios, ayudando a tantas parejas que lo habían dado todo por perdido a mejorar su comunicación y el resto de las áreas de la relación.
Las claves del Método C+
Estos mentores de parejas son los creadores del Método C+, un sistema creado por ellos para acabar con la comunicación tóxica en la pareja, y que explican así: “Nuestro trabajo consiste en romper con el devastador hábito de repetir los mismos errores una y otra vez, sobre todo cuando una pareja aún se ama y tiene al menos un proyecto importante en común, por ejemplo, los hijos. Es triste que la mayoría de parejas acaben rompiendo, no porque no se quieran, o por problemas psicológicos, sino porque no saben cómo parar sus discusiones y reconducir su comunicación”.
Sentirse escuchado, tener una comunicación pacífica, conocer a fondo a la otra persona, entender cómo se está sintiendo la pareja, y una escucha activa sin quejas ni reproches, es parte del camino que Olga y Fran enseñan a recorrer a sus parejas de «Amantes», como ellos les llaman.
Además de los cientos de parejas que pueden dar testimonio del trabajo de ambos, Olga y Fran son dos profesionales que también son pareja. Lo que enseñan, ellos mismos lo viven como pareja. Asimismo trabajan en grupo y de forma online, porque así el proceso de aprendizaje y modelaje se acelera. «No se trata de contarle a un profesional la última pelea o si te ha ido mal la semana con tu pareja, eso solo remueve los conflictos sin arreglarlos. Se trata de aprender nuevas habilidades, y para eso no hace falta que cuentes nada de tu vida íntima».
A diferencia de una terapia de pareja con un solo profesional, en Amantes Extraordinarios el acompañamiento lo realiza una pareja de profesionales que enseñan lo que viven. La potencia del aprendizaje grupal, el acceso online para que la distancia no sea un impedimento y el no tener que remover el pasado, marcan un proceso diferente a la terapia de pareja.
Amantes Extraordinarios surge de la idea de ayudar también a los más pequeños del hogar a tener una familia feliz y en calma porque, al final, los más pequeños de la familia son los que pagan las peores consecuencias de una mala relación entre sus padres. Ambos palparon de cerca la influencia del vínculo de los padres en la vida de los niños. Olga, por experiencia propia en el mal vínculo entre sus padres. Fran, como docente durante más de 15 años con niños que llegaban muy tristes, frustrados o infelices al colegio, influenciados por el trato entre sus padres.
Amantes Extraordinarios surge de la fusión de estas vivencias, las relaciones anteriores y una vasta experiencia en desarrollo personal. Desde ese punto de partida aseguran que es muy posible poder disfrutar de una relación de pareja sana, sin discusiones, reproches ni luchas de poder y sí con mucho amor y respeto. Para eso es imprescindible que las personas aprendan y entrenen nuevas habilidades afectivas, y así tendrán una relación sólida que funcione a largo plazo, concluyen.