Alrededor de 70.000 niños de más de 100 países participarán los próximos 25 y 26 de mayo en la I Jornada Mundial de Infancia, convocada por el Papa y que tendrá lugar en Roma (Italia).
En concreto, la jornada comenzará el 25 de mayo a las 15.30 horas en el Estadio Olímpico de Roma con un partido de fútbol que disputarán los niños y algunos jugadores profesionales, dirigidos por el italiano Gianluigi Buffon. Muchos de los niños que participarán en el encuentro provienen de países en guerra.
«Habrá niños de la República Democrática del Congo, que tanto ha sufrido a causa de la guerra que asola la región de norte del Kivu; de Afganistán, donde los focos mediáticos se han apagado tras la huida de la comunidad internacional de Kabul; de Siria, donde hay niños que nunca fueron a la escuela porque crecieron en campos de refugiados y también muchos niños ucranianos, acogidos en Italia tras la guerra gracias a los corredores humanitarios», ha explicado en rueda de prensa en el Vaticano el presidente de la Comunidad de San Egidio, Marco Impagliazzo, quien ha presentado el evento.
«También habrá una delegación de niños provenientes de Gaza, que contará con algunos de los niños heridos por las bombas que han llegado a Italia para curarse gracias a una misión humanitaria del gobierno italiano», ha añadido.
Para preparar esta gran cita se han tenido en cuenta las preocupaciones de la infancia. Por ello, miles de niños han remitido a los organizadores dibujos, redacciones y cartas de los que ha «surgido con gran insistencia un único mensaje: ‘Papa Francisco, ayuda al mundo a hacer la paz'», ha asegurado Impagliazzo.
«El suyo es un mundo muy diferente al de las generaciones que les han precedido: la paz es una exigencia apremiante de los niños, que el Papa ha comprendido y captado y que hace suya cada vez que habla de paz», ha añadido. Los niños ven violencia y odio, también cuando «ven a sus padres discutir y no piden otra cosa que la paz», ha asegurado el presidente de la Comunidad de San Egidio, que ha organizado la cita junto al Dicasterio para la Cultura y la Educación del Vaticano, el sacerdote Enzo Fortunato y la Cooperativa Auxilium.
El objetivo de este evento de dos días –estructurado a partir de conceptos como fraternidad, paz, medio ambiente y deporte– es clamar por la paz. «Queremos estar de su lado, hacer nuestro su grito de paz, su llamamiento para que el planeta no sea devastado. Queremos dar fuerza, alegría y esperanza a miles de niños. El Papa ha comprendido la necesidad de volver a partir de los niños para cambiar el mundo», ha asegurado Impagliazzo.
El Papa será el encargado de cerrar la primera Jornada Mundial de la Infancia en la Plaza de San Pedro, el domingo 26 de mayo. Junto a él estará el oscarizado actor y director italiano, Roberto Benigni, quien, tras el rezo del Regina Coeli interpretará uno de sus monólogos.
«La instauración de una Jornada Mundial de la Infancia, fuertemente deseada por el papa Francisco, es un acontecimiento de alcance mundial, no sólo para la historia de la Iglesia, sino para la humanidad», ha declarado por su parte el sacerdote Enzo Fortunato, director de comunicación de la Basílica Papal de San Pedro y principal coordinador de la Jornada Mundial de la Infancia.